En memoria de Inés; Compañera y colaboradora.

por chamlaty

  La mayoría supone que nuestro único deseo es vivir más tiempo en esta tierra. Sin embargo, morir, como dar a luz, es un camino hacia una nueva vida, tal como lo dice Eclesiastés 3:1 y 2 ‘Todo tiene su momento, y cada cosa su tiempo bajo el cielo: Su tiempo de nacer y su tiempo de morir’.

Debemos preparamos para nuestra muerte con el mismo cuidado y atención con que nuestros padres se prepararon para nuestro nacimiento».

Henri Nouwen. Pan Para El Viaje.La Muerte: un nuevo nacimiento

Hay tantas complejidades en la vida y una de ellas es tratar de entender cuestiones de salud y sus consecuencias, en este caso sobre el CANCER que se lleva a una Jovencita, prácticamente recién egresada de la carrera.

ESTARÁS SIEMPRE EN  NUESTROS CORAZONES Y RECUERDOS.
DESCANSA EN PAZ
INÉS ELIZABETH HERNANDEZ COTA.
INES

HISTORIA SOBRE EL CÁNCER, PREVENGAMOS APOYADOS EN LA EXPERIENCIAS DE VIDA Y MUERTE.

Tengo cáncer primario peritoneal. Este cáncer ha sido identificado  recientemente como un singular tipo de cáncer, pero esencialmente es cáncer ovárico. Ambos tipos de cáncer se diagnostican de la misma manera, con el marcador de tumores (prueba de sangre) CA-125, y se trata con la misma cirugía para quitar el tumor primario y luego quimioterapia con Taxol y Carboplatin.

Habiendo pasado por esta amarga experiencia, quiero prevenir a otras mujeres del mismo destino que tuve.

Una cosa que he aprendido es que cada una de nosotras, debe tomar total responsabilidad por nuestro cuidado en la salud.

Siempre me hacía un exámen anual de: papanicolao, mamografía, densidad ósea. Iba al dentista al menos dos veces al año. Me hicieron una sigmoidoscopia (inspección del recto y colon).

Cuando me hice una histerectomía total en 1993, pensé que no tenía que
preocuparme sobre tener cualquiera de los cánceres en los órganos
reproductivos femeninos. No tengo ovarios (y estaban bien cuando
fueron removidos), pero aún así, tengo lo que es esencialmente, cáncer ovárico.

Extraño… ¿verdad?. Estas son cosas, que algunos de nuestros
doctores no nos dicen. Una de cada 55 mujeres tendrán cáncer primario
peritonial y ovárico. El síntoma clásico es un abdomen que de repente
se agranda, además de estreñimiento y/o diarrea.

Yo tenía estos síntomas clásicos y fui al doctor. Porque estos síntomas
parecían ser abdominales, fui a un gastroenterólogo. El ejecutó pruebas
que se diseñaron para determinar si había una infección bacteriana;
estas pruebas resultaron negativas, y me diagnosticaron

«Síndrome del Intestino Irritable».

Supongo habría aceptado este diagnóstico si no hubiera sido por mi
abdomen agrandado. Parecía que yo tenía 4-5 meses de embarazada.

Por consiguiente insistí en más pruebas. Me tomaron una radiografía a mi abdomen  y fue negativo. Me aseguraron de nuevo que tenía Síndrome del Intestino Irritable y me alentaron a seguir mi programado largo viaje de
un mes a Europa, pero no podía usar cualquiera de mis pantalones o
shorts porque no podía abrocharlos, sospeché que algo estaba andando mal.

Fue entonces que insistí en más pruebas, ellos de mala gana programaron para mí, un CT-Scan (sólo para callarme, creo).

El CT-Scan mostró mucho fluido en mi abdomen (no normal), innecesario, es decir, tenía que cancelar mi viaje
y drenar cinco libras de fluido en el hospital (no fue un procedimiento
agradable lo aseguro), pero nada comparado a lo que estaba delante de
mí. Más pruebas revelaron células de cáncer en el fluido.

Finalmente, el doctor hizo la prueba de sangre CA-125, y me diagnosticaron que tenía los síntomas clásicos de un cáncer ovárico.

Esta simple prueba de sangre CA-125 … ¡Nunca me la hicieron!

Esta es una prueba de sangre simple y no cuesta mucho.

Por favor, dígale a todas sus amigas y parientes que insistan en una prueba de sangre CA-125 cada año como parte de sus exámenes físicos anuales. Les prevengo que sus doctores pueden tratar de decirles que no es necesario, pero de haber sabido lo que sé ahora, habrían
detectado mi cáncer mucho más temprano, antes que fuera de una fase 3.
Insista en la CA-125. No tome un «NO» como respuesta.

El rango normal por un CA-125 es entre cero y 35. El mío era de 754. (¡ Si
correcto 754 !). Si el número es ligeramente sobre 35, puede hacerse otro
test en tres o seis meses y estar alerta. Hacerse la prueba CA-125
anualmente puede alertar tempranamente, y esa es la meta en diagnosticar
cualquier tipo de cáncer en su fase inicial.

¿Conoces 55 mujeres? Si es así, por lo menos una de ellas tendrá este
muy agresivo cáncer. Por favor, ve a tu doctor e insiste en una prueba
de sangre CA-125, hazla cada año por el resto de tu vida.

Y envía este Mensaje a cada mujer que conozcas, y dile a todos los miembros de tu
familia y amigas.

Aunque la edad promedio para este cáncer es de 55 años, que
son los que tengo exactamente, pueden oscilar más o menos cinco a diez
años, pero no es excluyente de mujeres tan jóvenes como de 22 años también lo tengan. La edad no es ningún factor. Esta es una prueba de rutina que debería ser requerida tal como un papanicolao (un papanicolao no puede descubrir problemas cancerígenos en los ovarios).

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