Moneyball, lecciones que motivan.

por chamlaty

Seguramente viste la película MONEYBALL con BRAD PIT basada en la novela Moneyball: the art of winning an unfair game (2003), si no,  espero en breve tengas oportunidad de verla. Basada en hechos reales, cuenta la historia del gerente de un modesto equipo de baseball que decide empezar a gestionar los fichajes del equipo con métodos analíticos y estadísticos, frente al modelo tradicional basado solamente en intuición y olfato.

Veamos la siguiente síntesis en video:

Las claves que nos muestra esta brillante producción podemos resumirlas en las siguientes:

Mirar al problema. “No estás resolviendo el problema, ni siquiera estás mirando al problema”. Llegar a cualquier solución pasa, antes de nada, por entender el problema. La presión y la ansiedad que tienen muchos directivos en aportar “valor” y soluciones les lleva a lanzarse a debatir sin más sobre soluciones sin haber empezado por entender los problemas que se deben resolver.

Pensar diferente. Las buenas soluciones suelen venir cuando vamos por el camino creativo e inductivo y del pensamiento crítico, que ayuda al progreso de nuestros negocios y organizaciones. Bic no iba más allá del mundo del bolígrafo hasta que empezó a ver su negocio como algo más. Philips entró en el creciente negocio de la salud, cuando empezó ver sus productos con otros ojos.

El objetivo es comprar victorias, no jugadores. Confundir los objetivos con las acciones es un error muy frecuente. Habitualmente suelen ser los objetivos los que se disfrazan de acciones, pero también ocurre al revés. Parece sencillo, pero no siempre resulta evidente la importancia de estructurar bien las relaciones entre las acciones y los objetivos que aquellas deben ayudar a conseguir.

Paciencia. “Estamos en el primer día de la primera semana…”, por lo que es un poco pronto para empezar a ver resultados. Los cambios fundamentales y las transformaciones importantes tardan en llegar de la forma en la que los hemos previsto. Por ello no debemos anticiparnos a la hora de condenar determinadas iniciativas, ni precipitarnos al hablar de fracaso. Una vista larga ayuda a juzgar la tregua que debemos dar a nuestros planes de futuro.

Vamos a cambiar el juego. Y de esto es precisamente trata la película. De cómo un equipo modesto decide jugar y gestionar su equipo de un modo distinto que les permitiera competir con los millonarios presupuestos de los grandes equipos. Su modelo además es finalmente adoptado por todos los grandes equipos. Muchas pequeñas y medianas empresas tratan de emular los movimientos de los grandes, ignorando que muchas veces el éxito está precisamente en no copiar lo que hacen las grandes empresas. Para liderar no hay que copiar y tampoco es necesario ser grande.

 

 

Reiterando SIMPLEMENTE EJECUTA.

 

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